Vistas de página en total

lunes, 15 de febrero de 2010

¿Los jóvenes tienen poca prisa en hacerse mayores?


Esta pregunta que se encuentra como titular de esta reflexión, más bien es la declaración de una muchacha, Letizia Tierra, una voluntaria de una ONG y que recogía el autor del artículo titulado “Generación ni-ni: ni estudia ni trabaja”, publicado el 22/06/2009 en el periodico El País. Los términos que podemos encontrar en este artículo y refiriéndose a la Juventud van desde: apatía y falta de ilusión generalizada (Centro de Iniciativas de la Juventud), vulnerable, perdida, nuestros jóvenes se sienten presa fácil de la devastación laboral, sin proyecto alguno. 


Nuestros chicos son poco idealistas desarrollan una actitud nihilista, porque no se les exige estar motivados, ni asumir responsabilidades (Eduardo Bericat catedrático de Sociología de la Universidad de Sevilla). Son considerados por algunos expertos la generación del “presentismo”, aprovechar el presente el aquí y el ahora. También podemos encontrar estas afirmaciones: “los jóvenes de ahora no son capaces de arriesgar, son conservadores”. Se desprende con todo en una primera lectura que nos encontramos frente a una Juventud con una falta de apatía y de ilusión generalizada, en resumidas cuentas.

Sin duda alguna, con todas estas apreciaciones sobre nuestros jóvenes, y me dejo algunas en el tintero para que ustedes lo revisen en el articulo del País mencionado, la verdad es que el panorama se pinta más que feo. ¿Verdad?. No quiero decir con ello que comulgue con los términos que están definiendo a nuestra Juventud. ¡Para nada¡.

Quisiera apuntar algunos datos más a esa reflexión sobre nuestros jóvenes, y para ello recurro al último
Informe Juventud 2008. un informe que se apoya en una encuesta en la que se han entrevistado a 5.000 jóvenes entre 15 y 29 años. Este Informe aporta datos estadísticos acerca de numerosos aspectos relacionados con los y las jóvenes de nuestro país.

Entre otras, en el informe ser indica que en España, existe un núcleo importante de jóvenes (49,7%) que solamente ha conseguido un nivel educativo de secundaria obligatoria o inferior y que en la actualidad ya tiene dificultades para iniciar la inserción laboral. Este dato es importante.

Otro de los datos que me llama poderosamente la atención es que entre los 25 y los 29 años de edad el 43 % de los jóvenes varones viven con sus padres todavía, mientras que las mujeres es un 32 % y sensiblemente algo inferior los que tienen trabajo. En este último caso si las encuestas se hubieran celebrado durante el 2008 no obtendrían el mismo resultado.

Creencias y valores
En cuanto a las creencias y valores de la juventud, el informe Juventud 2008 señala una tendencia hacia la participación juvenil no institucionalizada y autogestionada, un 39% colabora en acciones solidarias, aún sin formar parte de ninguna organización. Sin embargo, en 2008 se observa un creciente desinterés por la política, estaban interesados en asuntos políticos en el 2004 un 23,2% mientras que en 2008 solo el 18 % de los jóvenes están interesados por la política. ¿Por qué esta sucediendo esto?. Me da la impresión que la respuesta se merece un punto y a parte o mejor dicho otra reflexión y entrar más a fondo. La clase política que tenemos no está a la altura de las circunstancias. Tenemos unos políticos mediocres, y sobre todo me refiero a aquellos que están para y por su propio interés.
Quizás esa joven que hacía esas declaraciones en El País tenía razón y es que eso de hacerse mayor es muy duro y más con los tiempo que corren. Pero, ¿dónde está la locomotora de este nuestro país?. Si los jóvenes no van a la cabeza, sino tiran del carro, ¿quién lo va hacer?. Estoy seguro que algunos y algunas sí lo están haciendo, aunque no hacen ruido, no se les nota, me alegra saberlo. Lo que sí les pediría es que tengan ojo avizor hacia los que se proclaman los salvadores de la Patria, de la España que tanto aman y desean el bien para todos. De esos salvadores de Patria que apliquen lo que decía el jesuita Baltar Gracian (S. XVII) en su aforismo 191, "quien todo lo promete no promete nada" .

Para terminar, solo recordar a mi querido
Platón, "si a nuestros Jóvenes se les da la correcta educación todos nuestros asuntos irán bien, si ocurre todo lo contrario, si descuidamos su educación mejor no hablar de ello". Es importantísimo que nuestra Juventud sea atendida, escuchada y participe en la vida política y social de nuestra Sociedad. Y sino a los datos.

1 comentario: