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miércoles, 16 de agosto de 2017

Publicado el poema, Triste mirada

Acabo de recibir la publicación del poema Triste mirada con el que me quedé Finalista en el Iº Certamen Literario de Poesía "Libro Solidario". Publicado por Letras como Espada.


lunes, 14 de agosto de 2017

Una coctelera cargada de mediocridad


Hoy, he metido en esta magnífica coctelera de las letras que me brinda este medio de comunicación los siguientes ingredientes: astronómica cifra del fichaje de un futbolista y letra de canción denigrante contra la mujer.
En el primer caso me refiero al llamado en muchos medios, culebrón Neymar,  que por fin se va al PSG (Paris-Saint-Germain) y que va a suponer uno de los fichajes más elevados de la historia del futbol: solo el importe de la cláusula de rescisión asciende a 222 millones de euros; pero si no hay acuerdo con el PSG, el montante podría dispararse hasta los 300 millones. ¿Por qué este fichaje levanta pasiones entre los aficionados y moviliza a los medios de comunicación? Pues porque, al fin y al cabo, estamos hablando de money, de Don Dinero. Con el incremento de las desigualdades sociales y la aparición de la Aporofobia (rechazo, aversión, temor y desprecio hacia el pobre), parece un contrasentido, además de una injusticia, dedicar espacio a este fichaje en la prensa o en la televisión pública (pagada por todos) en lugar de tratar de los problemas reales de miles de españoles.
El otro ingrediente de esta coctelera es el de la letra de una canción de moda que incita al menosprecio y maltrato hacia la mujer. Me refiero a la canción 4 babys con letra de contenido fuertemente sexista (Siempre me dan lo que quiero... Chingan cuando yo les digo...Ninguna me pone pero...). Esta canción está siendo muy criticada y ha sido vetada de las Fiestas por el Ayuntamiento de Ribarroja. Celebramos esta decisión que responde al principio del respeto hacia todas las personas. Como en el caso anterior, es cuestión de dinero; pero en este segundo, el dinero se antepone a los derechos de las mujeres.  

sábado, 5 de agosto de 2017

Hay que hablar de la aporofobia


Hay que poner nombre a las cosas o llamar a las cosas por su nombre, lo contrario es la inexistencia, el olvido; lo que no se ve, no existe. Por ejemplo, no se habla de la aporofobia que es, según el Diccionario de la lengua española: “odio, repugnancia u hostilidad ante el pobre, el sin recursos, el desamparado”. Como indica Adela Cortina, catedrática de Ética y Filosofía, en su último libro, Aporofobía, el rechazo al pobre. Un desafío para la democracia: “resulta urgente poner nombre al rechazo al pobre, al desamparado, porque esa actitud tiene una fuerza en la vida social que es aún mayor precisamente porque actúa desde el anonimato”.